Cartones abstractos. Hace un par de días que unos colegas, otro taller de enmarcación publicó en Instagram unas fotos muy parecidas a ésta que vemos arriba. Y nos sentimos identificados con ellas. Las texturas, colores y formas que vemos son el resultado de trabajar nuestros marcos hechos a medida sobre unos cartones para no manchar la mesa de trabajo. Cuando se retoca un marco, o se decora de nuevo , o se interviene encima de él por cualquier motivo, siempre queda la marca y la huella de ese trabajo, queda el negativo . Y como es de suponer, cada vez es de un color diferente, o con un tipo de tinte, pintura o material diferente. Siempre cambiante. Cada día distintos. Son la historia del día a día de nuestro trabajo hecho a mano. Del trabajo de buscar en cada marco, en cada enmarque, el resultado que espera nuestro cliente, la persona o personas que van a ver ese cuadro colgado todos los días, y que espera que les transmita unos sentimientos y efectos concretos. Los que ellos quieren en definitiva.
Pues estos cartones son los testigos, callados, de la vida diaria de los trabajos que pasan por el Taller.